La OPEP tiene últimamente la costumbre de reducir la producción de barriles diarios de petróleo para que suba el precio del crudo. Los países consumidores de petróleo, para poder pagar la subida, tienen que recortar el gastote otros productos o pedir prestado. Los países exportadores hacen, desde la creación de la OPEP en 1960, tres cosas: gastarlo en guerras (primera guerra del Golfo entre Irak e Irán); invertirlo en desarrollo; o prestárselo a los consumidores que necesiten liquidez para comprar petróleo y que así no dejen de consumir (sobre todo tras la subida que duplicó su precio entre 1973: pasó de 2 a 5$), de esta forma obtienen el dinero del petróleo y los intereses con que han comprado el petróleo. Esto último son los petrodólares.
En los países ricos o en vías de desarrollo no tenían problemas para recuperar los préstamos. Pero en los países pobres podía darse el caso de que los préstamos se usasen para pagar el petróleo, entonces no dejarían de ser pobres; o desarrollarse y no pagar la factura del petróleo. Pagaron el petróleo.
La OPEP (1979-1980) vuelve a subir el precio (pasa de 10 a 40$). Los países ricos se endeudaban a corto plazo y salían sin mucho déficit, pero los países pobres ya estaban endeudados y se sobreendeudaron tanto que no podían pagarlo. Hay una frase que dice: “Si le debes 1000 a un banco y no puedes pagarlo, tienes un problema; si le debes 1000 millones y no puedes pagarlo, el problema lo tiene el banco”. Lo que ocurrió es que se les alargó la deuda, claro está, con más intereses. Adiós a la evolución de estos países, casi todos africanos.
Los países ricos empiezan a utilizar energías alternativas, que empezaron a ser rentables con las subidas del crudo. Se crean centrales nucleares. Francia crea 80 y reducen su consumo de petróleo en un 50%. Así se evita problemas a corto (reducción de su consumo) y a largo plazo (futuras subidas del precio del barril).
Ahora bien, con las subidas de petróleo, los verdaderos afectados son los países pobres que no pueden innovar al tener que pagar el petróleo. El mundo va a seguir funcionando. Lo que ocurre es que mientras los movimientos de las clases medias de los países ricos critican al G-8, silencian las actuaciones de la OPEP por cada $ que suba el petróleo, es 1$ menos que se dedicará en los países pobres al control de epidemias y de hambrunas. Las grandes campañas de Greenpeace, entre otras, utilizan temas demagógicos como la pobreza y el desarrollo y se olvidan del centro del problema.
En los países ricos o en vías de desarrollo no tenían problemas para recuperar los préstamos. Pero en los países pobres podía darse el caso de que los préstamos se usasen para pagar el petróleo, entonces no dejarían de ser pobres; o desarrollarse y no pagar la factura del petróleo. Pagaron el petróleo.
La OPEP (1979-1980) vuelve a subir el precio (pasa de 10 a 40$). Los países ricos se endeudaban a corto plazo y salían sin mucho déficit, pero los países pobres ya estaban endeudados y se sobreendeudaron tanto que no podían pagarlo. Hay una frase que dice: “Si le debes 1000 a un banco y no puedes pagarlo, tienes un problema; si le debes 1000 millones y no puedes pagarlo, el problema lo tiene el banco”. Lo que ocurrió es que se les alargó la deuda, claro está, con más intereses. Adiós a la evolución de estos países, casi todos africanos.
Los países ricos empiezan a utilizar energías alternativas, que empezaron a ser rentables con las subidas del crudo. Se crean centrales nucleares. Francia crea 80 y reducen su consumo de petróleo en un 50%. Así se evita problemas a corto (reducción de su consumo) y a largo plazo (futuras subidas del precio del barril).
Ahora bien, con las subidas de petróleo, los verdaderos afectados son los países pobres que no pueden innovar al tener que pagar el petróleo. El mundo va a seguir funcionando. Lo que ocurre es que mientras los movimientos de las clases medias de los países ricos critican al G-8, silencian las actuaciones de la OPEP por cada $ que suba el petróleo, es 1$ menos que se dedicará en los países pobres al control de epidemias y de hambrunas. Las grandes campañas de Greenpeace, entre otras, utilizan temas demagógicos como la pobreza y el desarrollo y se olvidan del centro del problema.
Dentro de los países ricos también habrá repercusiones. ¿Quién va a pagar la elevación de los costes del petróleo? Los inmigrantes, porque cuando haya recesión, que ya la hay, serán los primeros en irse a la calle. El ministro español de Inmigración y Trabajo, Celestino Corbacho, dijo que estaba dispuesto a pagar a los inmigrantes para que se vayan. Los españoles no se pueden ir.
“Quien ve hacia afuera, sueña; quien ve hacia adentro, despierta.”
Carl Young
1 comentario:
Conozco a la persona que scribió el artículo, y creo que no hay sensatez más grande que la que él escribió en este artículo.
Los árabes aprovechan su postura ventajista en cuanto a esta materia prima se refiere. Pero lo que no saben es que el "ORO AZUL" , el agua, es lo que más va a valer al final. Como siempre se acaban etapas, para dar paso a otras. E aquí una vez más una guerra perdida por el Oriente Medio.
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